Cuando hablamos de organizar un evento no es lo mismo hacer un cumpleaños que una boda, un comité de bienvenida o una reunión de trabajo. Cada uno de ellos debe tener una características y unas condiciones propias, y son los organizadores quienes deben tener todo controlado al milímetros para que las cosas salgan como tienen que salir. Sin embargo, hay eventos que, a pesar ser muy prestigiosos y de que muy posiblemente el hecho de gestionarlos nos abra muchas puertas en nuestro futuro laboral, no querríamos organizar ni en nuestras peores pesadillas.
Uno de los más emblemáticos es la conocida Gala de los Óscar. Esta entrega de premios se celebra anualmente en los Ángeles y los cientos de invitados que acuden a ella son los artistas que cargan en sus hombros el peso de la industria cinematográfica más importante del mundo. ¿Aceptarías la responsabilidad de gestionar un evento de esta magnitud? ¿Serías capaz de llevarlo a cabo sin que haya ningún error de por medio capaz de estropear la gala? ¿Sabrías cómo mantener el ritmo para que le interés del público y de los millones de espectadores (sí, has leído bien, millones de espectadores) que siguen la gala desde sus hogares no decaiga? Sin lugar a dudas es una tarea muy complicada que muy pocos son capaces de llevar a cabo con éxito.
Una de las galas más importantes del año
La Gala de los Óscar se celebra de forma general en el Dolby Theatre, un prestigioso teatro situado en el Hollywood Boulevard (Los Ángeles). Cada año se reparten en ella infinidad de premios con los que se reconoce el trabajo de todos aquellos profesionales de la industria del cine cuyos trabajos hayan destacado especialmente de entre las cientos de películas que se ruedan anualmente. A este evento acuden actores y actrices muy famosos, modelos, cantantes, directores, productores, maquilladores, los medios de comunicación más importantes del mundo… Prácticamente la ‘crème de la créme’ estará allí, y tu trabajo, en caso de ser tú quien organice este glamouroso evento, es no cometer ningún error.
De forma previa a la gala tiene lugar un pre-evento conocido como ‘La Alfombra Roja’. Esta se televisa prácticamente en todo el mundo, y en ella podemos ver la llegada de los famosos al Dolby Theatre luciendo sus mejores modelos y concediendo pequeñas entrevistas a los reporteros de prensa que han tenido la suerte de cubrir tal evento.
Los presentadores de la gala
A lo largo de la noche, la gala cuenta con diferentes presentadores que van entregando los premios a los talentosos profesionales que han tenido la suerte de estar nominados. Estos presentadores suelen ser caras conocidas en la industria, actores y actrices que les sonará a cualquier aficionado al cine. Además, habrá un presentador oficial que será el encargado de llevar el peso de la gala y de dar paso a cada uno de los premios. Este presentador debe ser una persona dinámica y preparada para llevar la gala por buen camino, capaz de mantener al público entretenido durante las más de dos horas que dure el evento.
Las votaciones de la academia
Muchos se preguntan quién vota para dar un premio a uno u otro profesional del cine. La verdad es que son las mismas personalidades que conforman el mundo del entretenimiento quienes, cada año, reciben una invitación para votar a su candidato favorito (o favorita) para llevarse la ansiada estatuilla.
Alrededor de unas seis mil personas tienen el honor de poner su granito de arena en las votaciones para los Óscar, y aunque siempre hay diferentes debates y polémicas en torno a esto, el conjunto de los votos es lo que determina quién se lleva la estatuilla y quién no.
La presencia de la prensa
La prensa también desempeña un papel fundamental en esta gala. Los reporteros escogidos para acudir a la ceremonia no sólo deben conocer de cabo a rabo las películas nominadas para poder hablar de ellas, sino también al equipo que ha hecho posible que estas cintas hayan llegado hasta allí. Además de la ceremonia en sí, el papel de la prensa durante La Alfombra Roja es fundamental para dar voz a la infinidad de intérpretes, directores y estrellas en general que están nominados a recibir estos premios.
La gala debe mantener un buen ritmo
El número de categorías es casi inabarcable: mejor película, mejor dirección, mejor actriz principal, mejor guión original, mejor guión adaptado, mejor banda sonora, mejor montaje…, es por ello que para que el público no se aburra la gala debe tener un ritmo frenético y un contenido que mantenga la atención de los seguidores del evento en todo momento.
La gala debe contar con una escaleta que tenga el ritmo bien marcado y que incluya números musicales, intervenciones en vídeo, entregas de premio… Además, como hemos dicho, el trabajo del presentador es de vital importancia, ya que el éxito de la gala depende en gran medida de él.